28 de enero de 2009

De Dominic y María Santiago: la escena más extraordinaria de un videojuego

Si el titulo de la entrada no ha sido suficiente para espantarlos y alejarlos de leerla, si ha de hacerlo el decirles que no está equivocado: voy a hablarles de la escena más extraordinaria jamás conseguida en un videojuego.

Por principio de cuentas hablamos de uno de los mejores juegos creados, Gears of War 2. Es cierto, su historia es un verdadero fiasco, predecible a niveles absurdos y tonta a niveles mayores. La primer entrega había conseguido una historia que, aunque no extraordinaria, resultaba cuando menos interesante y eso fue justamente lo que acabó con la segunda parte, excepto por una cosa, una sola cosa que salva a la historia y, de no ser por las portentosas gráficas y el estupendo modo de juego, también al juego.

Hablo de la historia de Dominic Santiago y su esposa María. Ya saben, hay una guerra, la humanidad se enfrenta a los Locust, unas criaturas "inhumanas y genocidas" (cito al presidente Prescott, uno de los personajes del juego) que salen de debajo del planeta Sera que cohabitan con los humanos. En resumen, ambas razas buscan erradicarse y en esa lucha los Locust comienzan a tomar prisioneros, entre ellos Maria Santiago.

Del personaje se sabe poco, es esposa de Dominic (uno de los gears que combaten con mayor fiereza) y huyó de casa al iniciarse la guerra para ser capturada después. En el juego, mientras se dan de catenazos humanos y Locust, Dominic Santiago busca información de su esposa hasta que, finalmente, en el penúltimo acto, descubre donde la tienen. Va allí, da con ella y... bueno, ¿no pretende que les eche a perder la escena verdad?

Dejo mi relato hasta allí y me detengo a hablar un poco de la escena, un regalo de EPIC Games de cerca de tres minutos que, para qué mentirles, me arrancó lágrimas. Quizá sea por que soy estúpidamente sensible o por que mi corazón sigue enamorado pero, hay que decirlo, la escena me hizo llorar. La secuencia, la música, los diálogos (los vi en español y son esplendidos; ya vi la versión en inglés y también lo son), el trasfondo, son de diez. Si hubiera Oscares a esto, no hay duda, son para Dominic y esa escena.

Si ustedes son jugadores de XBox 360 y tienen en su poder una copia del juego, por favor, no bajen esta pantalla y, por lo que más quieran, no le den Play al video, en serio no querrán echarse a perder la mejor escena del juego, mejor pasen la campaña y véanla, súfranla. Si no tienen la consola o el juego, o bien no gustan de jugar a estas cosas del diablo (según ciertos predicadores, incluido un niño predicador), por favor den Play al video y disfruten la que, para mi, es la mejor escena jamás conseguida en un videojuego. Aquí está.



Olvidé decirles que tuvieran sus pañuelos cerca, como yo.

19 de enero de 2009

"José Pérez León", de los Tigres del Norte

En uno de esos azarosos viajes que se consiguen con tiempo de sobra y una ventana de Internet con el Youtube abierto, me topé con una melodía que hacía mucho no escuchaba y que reconocí desde el primer acorde: "José Pérez León", de los Tigres del Norte.

No, no es una canción buena. Nada parecido. Ni siquiera me pondré a discutir, como ocurre en los comentarios del video (en YouTube, claro), sobre si es o no un cuadro extraordinario de los sufrimientos de los mexicanos que cruzan al otro lado y mueren en el intento, o de la crudeza y gravedad de tal problema. Nada de eso. Por el contrario, lejos de polémica alguna, me limito a compartirles una canción que me amenizo un poco mí aburrida tarde. Sólo eso.

Con las salvedades señaladas, les dejo a continuación el video con la melodía y enseguida la letra por si les entraron ganas de cantarla. Digamos, simplemente, emulando al Blog de Dieter, que es "La rola de hoy"



Él era un hombre de campo
oriundo de Nuevo León,
tenía apenas 19 años
su nombre: José Pérez León

Tenía un primo lejano
que de mojado se fue
al poco tiempo le envió un telegrama
diciendo ven pronto José.
Pues un trabajo le habían encontrando
distando algodón como él

Y se fue, y se fue
ahogando el llanto en el adiós
con su mujer.
Se fue sin saber,
que de ese viaje ya jamás iba a volver.
Pobre José

Cuando llegó a la frontera
con Willy se entrevistó.
Era el pollero más afamado
y astuto de la región.
Le dijo Pepe hoy estas de suerte
mañana te cruzo yo.

La madrugada de un viernes,
en una vieja estación,
30 inocentes pagaban su cuota,
entre ellos, José Pérez León
y sin dudarlo a todos metieron
en el interior de un vagón.

El tren cruzo al otro lado
casi 7 horas después
fue cuando el aire empezó a terminarse
y ya nada pudieron hacer,
nadie escucho aquellos gritos de auxilio
y la puerta no quiso ceder.
Uno por uno se fueron cayendo
y así falleció el buen José

Y se fue, y se fue
a cruzar el cielo con sus ansias de crecer.
Se fue sin saber,
que ya su esposa un hijo suyo iba a tener.
Pobre José

Así termina la historia, no queda más que contar
de otro paisano que arriesga la vida
y que muere como ilegal,
de aquel José que mil sueños tenía y que a casa
jamás volverá.

16 de enero de 2009

Cuentacuentos 1: Presentación y "Conejos blancos", de Leonora Carrington

Anunciaba en mi anterior entrada que la próxima vez que escribiera en este blog lo haría para presentar una innovación. Lo prometido es deuda y les compartó ahora la primera edición de "Cuentacuentos", un tipo de entrada que espero sea tan recurrente como sea posible.

¿Que es cuentacuentos?, lo que se oye, el contar cuentos. Mejor dicho, el narrarlos. Es un espacio en el que pretendo presentarles algunos cuentos breves de autores importantes para acercarlos a ellos con la esperanza de que puedan leerlos después. Por eso mismo, también agregaré inicios de novela, con el mismo fin de interesarlos y, espero, motivarlos a leerlas.

Aunque mi intención original era narrar los cuentos yo mismo y subirlos a este blog, pronto me di cuenta que mi tono de voz y mi capacidad de lectura no es la deseada, por ello, y mientras encuentro una mejor solución, he recurrido a un software que convierte el texto en voz: Text Aloud. No obstante, este programa tiene incluidas unas voces informáticas horripilantes que sencillamente no me gustaban para narrar nada, así que solucione tal problema descargando las voces desarrolladas por Loquendo.

Con estas voces las narraciones se vuelven más naturales, aunque no están exentas de algunas complicaciones. Al final creo que Esperanza, la voz mexicana de Loquendo; y Diego, la voz argentina, resultaron las mejores para narrar los cuentos y capítulos de novela que les iré presentando.

Además, cada relato irá acompañado de una breve presentación de su autor, sólo para complementarlo. Para el primero, narrado por Esperanza y subido al final de esta entrada, he elegido el cuento "Conejos blancos", de la pintora y literata anglo-mexicana Leonora Carrington. El mismo, incluido en la obra El séptimo caballo y otros cuentos, lo descubrí en una reciente lectura y mi fascinación por el fue tal que me animé a darle el honor de ser el primer relato de esta innovadora sección de Cuentacuentos.

Carrington, más reconocida como pintora que literata, nació en Lancashire (Inglaterra) en 1917 y actualmente vive en México, a donde se trasladó en 1942. La obra de la que esta tomada el cuento se publicó en 1988 cuando la autora ya tenía la nacionalidad mexicana y el prestigio de pintora surrealista bien ganado y defendido. Cabe decir que aunque es reducida, su obra literaria es destacada, al grado tal que un hombre de la talla de Julio Cortázar (de quien hablé hace muy poco) se limitó a decir que escribía "cuentos estupendos, como nunca se me habría ocurrido hacerlos."

Espero se hagan su propia opinión y, tras escuchar este cuento, se acerquen a la obra de esta importante autora. Aquí el relato, agregado como podcast gracias al extraordinario sitio web Poderato:


Tomado de: Cuentos inolvidables según Julio Cortázar. Prólogo de Carlés Álvarez Garriga. México: Alfaguara, 2008 (Serie Roja) pp. 73-78.

7 de enero de 2009

De vuelta

Las vacaciones suelen tener la enorme ventaja de alejarnos del trabajo o la escuela y la actividad cotidiana para relajarnos o, como dicen, distraernos. Sin embargo, a veces tambien consiguen alejarnos de aquellas cosas que hacemos a la par de la escuela. En mi caso, lo confieso, las vacaciones me alejaron de la escuela y del Blog, éste que hago a la par de la primera.

De cualquier manera, estoy de vuelta después de disfrutar un muy buen periodo vacacional y para añadir más y mejores entradas a este blog que renové precisamente para no abandonar. La próxima entrada, de hecho, es una innovación que se me ha ocurrido y que espero guste.

Aprovecho para desearles felices fiestras (retrasadas), felices reyes (retrasados un poco menos) y la mejor de las suertes en este nuevo año. Y de paso les dejo una foto para que vean que en efecto me fuí de vacaciones y no fue simple pereza lo que me impidió actualizar el blog.

En la playa, leyendo a Kundera... insuperable. ¡Hasta pronto!